Ahora que llega el verano muchos estarán pensando en salir de vacaciones, relajarse y disfrutar. A la mayoría de las personas nos encanta ir a la playa y tomar el sol para regresar con un bonito tono dorado o bronceado. Pero ¿cómo lograrlo sin sufrir quemaduras, ardores o daños en la piel? ¿Cómo evitar pelarnos a la semana siguiente?
Lo primero que debes saber es que asolearse no debe tomarse a la ligera. Nuestra piel es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo ya que protege nuestros órganos internos de factores externos. No cuidarla puede traernos consecuencias negativas, desde envejecimiento prematuro hasta problemas de salud graves como cáncer de piel.
Es así que si piensas asolearte durante estas vacaciones sin dañar tu piel, sigue las siguientes recomendaciones:
Antes
Antes de que vayas a broncearte deberás preparar tu piel con una limpieza y exfoliación profunda. Esto te ayudará a retirar las células muertas de tu piel y así dejar la nueva piel lista para el bronceado, además de que lucirá mucho más bella y saludable. Podrás exfoliarte con productos especializados para ello, o con esta receta casera: mezcla limón, azúcar y unas gotas de aceite de oliva y frota tu piel con ella, déjala actuar algunos minutos y después retírala con agua. ¡No abuses de este procedimiento! Lo ideal es llevarlo a cabo una 1 o 2 días antes de asolearte.
Además de esto, deberás agregar a tus hábitos de alimentación muchas ensaladas, frutas y abundantes líquidos, para favorecer la hidratación de tu piel y cuerpo. Además, te aconsejo consumir jugo de zanahoria o jitomate diariamente o raciones de zanahoria o jitomate crudo durante un mes antes de irte a la playa, ya que gracias a los carotenos y la vitamina A que contienen activarás la melanina, que facilitará a obtener un bronceado más rápido y duradero.
Por último deberás elegir el bloqueador o bronceador adecuado dependiendo de tu tipo de piel. Si tu piel es muy clara deberás utilizar uno con FPS mínimo de 30, y si es morena podrás utilizar uno con FPS menor a 30.
Durante
Cuando vayas a broncearte, aplica el bloqueador solar media hora antes de exponerte al sol, y vuelve a aplicar cada dos horas para mantener la protección; si estuviste en contacto con el agua o tuviste sudoración excesiva, aplícalo inmediatamente después de haberte secado. Recuerda que aun cuando quieras broncearte, es importante aplicar bloqueador solar para protegerte de los rayos UV.
Aplica el bloqueador uniformemente sobre todo tu cuerpo, así evitarás manchas o zonas más claras. No olvides utilizar un protector de labios para evitar que se dañen con la exposición al sol. Ah, y por ningún motivo te apliques aceites de ningún tipo para broncearte, ya que lo único que conseguirás serán quemaduras severas.
Evita asolearte durante muchas horas seguidas, especialmente entre las 12 del día y las 4 de la tarde, ya que es cuando los rayos solares son más agresivos. La regla de oro para lograr un color bonito en la piel es no quedarse varias horas bajo el sol, sino hacerlo en intervalos de tiempo que den como total máximo una hora al día, así evitarás quemaduras que además de dañar tu piel, no te harán lucir bien.
Después
Luego de haberte bronceado o expuesto al sol, toma un baño de agua tibia para cerrar los poros y eliminar todos los restos de crema protectora o bronceadora. A continuación, aplica una crema post-solar o altamente humectante en tu piel, de preferencia que contenga aloe, para hidratarla y mantenerla fresca. Esto te ayudará a evitar la comezón y el ardor.
Si abusaste del sol y por la noche sientes inflamación, dolor y calor en tu piel, pon sobre ella compresas frías o algún gel post-solar previamente refrigerado, además de tomar duchas de agua fría. Esto aliviará el malestar.
Los días posteriores al bronceado sigue aplicando cremas hidratantes y aloe, ya que la humectación después de asolearte es la clave para que no se reseque la piel y termines pelándote en poco tiempo.
Finalmente, recuerda que la piel es para toda la vida y que lo que le hagas hoy puede tener consecuencias mañana, por lo que lo mejor será que la cuides y regreses de tus vacaciones luciendo espectacular y saludable.
S. Illinwoght & Anita Váz